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MUSASHI

Que Madrid está inundado de restaurantes japoneses no es decir nada nuevo; hace muchísimos años que descubrimos las bondades de esta deliciosa gastronomía. Pero encontrar uno suficientemente auténtico y sin pretensiones es ya otra historia (salvando modestos comedores como Naomi, Hanakura o Yamate, la espectacularidad del resto deriva o bien de la calidad suprema de la materia prima y magistrales experimentos de fusión e innovación, lo cual se paga, o de una decoración fashion y urbanita, que mucho ruido y pocas nueces). Por eso se agradece poder catar esta culinaria sin que sufra el bolsillo y sin preocuparnos de si llevamos el atuendo adecuado para ver y ser vistos…

La callecita Conchas, muy cerca de la preciosa Ópera, esconde en su número 4 un restaurante que yo califico de tasca-japo, muy popular en la capital entre los devotos de la comida nipona por la autenticidad de su cocina y la relación calidad-precio (a Musashi se le conoce popularmente como “Japotalego”, porque en sus inicios un variado de sushi costaba sólo 1.000 pesetas).

¿Cómo colgar la etiqueta de “auténtico” a un restaurante oriental? Muy sencillo, si reúne las siguientes condiciones: decoración austera (la falta de autenticidad de un oriental es directamente proporcional al número de budas dorados con cara feliz, murales tridimensionales y enredaderas de pega). En el caso de Musashi, el local tiene dos niveles, con mesitas muy pegadas y tonos neutros; algunos hablarían de minimal, pero toda la vida se ha dicho “cutre”.

En segundo lugar, la carta: platos de nombres imposibles pero deliciosos (menos mal que ponen fotos) y de cantidades más que decentes. Este lugar me gusta porque puedo comer buen sushi a un precio razonable (la degustación de sushi variado cuesta 15 euros y con un platito más (por ejemplo, el teriyaki de atún en salsa dulce que se deshace en la boca) se come perfectamente (unos 20 euros por persona).

Siempre hablo de los postres porque desde hace tiempo soy golosa empedernida; aquí se pueden degustar los típicos dulces japoneses que a mí personalmente no me vuelven loca pero suponen algo distinto, con sus coberturas gelatinosas y esponjosas, y sus sabores a té verde.

Y en tercer y último lugar, la rapidez y trato del servicio. Cuanto más rancios y eficientes sean los camareros orientales, más te sentirás como en el país asiático. He de reconocer que aquí no son especialmente bordes, pero si pueden ir despachando rápido para gozar de más clientela (por cierto, Musashi casi siempre está a reventar y es necesario reservar con antelación), mejor que mejor. Pero conmigo lo llevan claro, porque no nací en Extremo Oriente y disfruto de la sobremesa. Sobre todo si se hace en buena compañía (mi amiga de toda la vida Virginia y yo nos reencontramos aquí desde hacía no se cuántos años para desgracia de los camareros, que ya no sabían como deshacerse de dos charlatanas como nosotras). 

Musashi es una opción genial para degustar comida japonesa sin muchas pretensiones a un precio más que razonable, algo no tan sencillo de encontrar (descartando los sushis giratorios “all you can eat”, que por 10 euros no pueden augurar nada bueno…), y en un marco auténtico. Todo un clásico capitalino.

4 Respuestas a “Musashi”

  1. Monic dice:

    Es uno de mis japos preferidos. Lo conocí hace ya mil años, como en 1997, y me llevó una amiga japonesa, porque allí trabajaba de cocinero su hermano. Eso ya te da una idea del nivel de su comida, aunque no sean de los que se han subido a la parra con los precios.

    • admin dice:

      Mónica, totalmente de acuerdo contigo… muchas veces los japos van unidos a un pijerío y a una tontería…Si conoces orientales del estilo, auténticos, no dudes en sugerírmelos para incluir en el Blog. ¡¡Gracias!! un abrazo

  2. Mimi dice:

    Hola Mónica! Doy fe de TODO lo que dices. Me encontraba en Musashi el día del ataque a las tres gemelas, comiendo uno de esos menús de “talego”. Curiosa la tempura de este sitio, muy diferente de la de otros japos. Besos!

    • admin dice:

      Hola Mimi, yo no llegué a pagar un “talego” pero el sitio merece una visita, ¿verdad? cuando quieras nos pasamos y compartimos un buen sushi :)

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